Tres costes ocultos en tu configuración multinube
- Cloud networking
- 11 de julio de 2022
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Si buscas mejorar los resultados de tu negocio, hay algunos costes ocultos que debes tener en cuenta en lo referente a la nube. Aquí te explicamos cómo gestionarlos.
No es ningún secreto que conectarse a la nube tiene un coste. Ya se trate de cuotas de suscripción o de paquetes de almacenamiento, tu factura de la nube puede aumentar rápidamente.
La popularidad de la multinube no para de crecer: se espera que el 94 % de las organizaciones adopten una red multinube de aquí a 2024, mientras aumentan los modelos de trabajo desde cualquier ubicación tras la pandemia de COVID-19, pues se trata de una configuración llena de ventajas para el rendimiento de la red, la seguridad y la gestión. Sin embargo, sin la configuración adecuada, los costes se pueden amontonar fácilmente, procedentes de donde menos se espera. Por suerte, hay formas de reducir y gestionar estos costes ocultos para asegurarte de que tu experiencia con la multinube no te cause sorpresas.
Las ventajas
Cuando tu negocio se conecta con varios proveedores de nube, puedes esperar unas cuantas ventajas que la configuración de red tradicional o de nube única no te puede prometer. En primer lugar, tienes la libertad de elegir lo mejor de las funciones que necesitas, sin estar atado a ningún proveedor (como ocurre cuando un usuario está obligado a continuar utilizando un servicio porque cambiarse a otro proveedor no es práctico), así como un plan de recuperación de desastres seguro y rentable si alguno de tus proveedores secundarios te falla de forma inesperada en caso de vulneración de datos o fallo del sistema.
Los costes ocultos
Sin la planificación adecuada, la comodidad de la nube puede ser muy costosa. Además de las inevitables cuotas de conexión, debes tener en cuenta tres costes clave a la hora de presupuestar los gastos de nube de tu empresa:
1. Costes de salida: el coste de migrar los datos desde un proveedor de servicios de nube (CSP) 2. Red subyacente: el coste de instalar y mantener la conectividad hacia y entre las nubes 3. Desviación de datos de nube a nube: el coste de enrutamiento entre nubes a través de un centro de datos sobre el terreno (un coste que se puede mitigar utilizando un enrutador de nube virtual).
Costes de salida
Aunque puedes migrar todos los datos que quieras a un CSP, se te cobrará por GB de datos cuando los migres hacia fuera: de ahí el término “salida”, en el sentido de “abandono”. A menudo, lo que hace que estas tasas queden ocultas es que se suelen facturar a posteriori, lo que significa que pueden generarse en segundo plano mientras las aplicaciones continúan extrayendo datos. Supervisar y gestionar estos costes pueden convertirse en un desafío importante para las grandes organizaciones que dependen de varios proveedores de nube para soportar sus cargas de trabajo a nivel global.
Estos costes pueden variar en función del volumen de datos que muevas y a dónde los muevas (transferir datos entre zonas de disponibilidad tendrá un coste menor, pero hacerlo entre distintos continentes, por ejemplo, podría disparar tu factura de nube). Además, todas estas cuotas se cobran más caras cuando el tráfico o los datos se enrutan a través de una conexión pública, como Internet (el tema de los costes de salida se trata con más detalle en nuestra).
Así pues, aunque los costes de salida pueden ser un obstáculo inesperado para el crecimiento de tu negocio, existen métodos para asegurarte de que no sean desorbitados.
Cómo reducir tus costes de salida
Hay varias formas de mantener bajo control los altos costes de salida ocultos. Organizando y migrando estratégicamente los datos almacenados entre diferentes nubes, puedes minimizar de forma eficaz las facturas de salida de los CSP, y asegurarte así de poder dedicar más presupuesto a lo que realmente necesitas.
En primer lugar, es importante establecer conexiones a través de una red privada y segura, y no con una VPN de la red pública de Internet. Y los CSP te recompensarán por ello: al conectarte con la conexión privada propia de cada proveedor (por ejemplo, AWS Direct Connect o Microsoft Azure ExpressRoute), puedes disfrutar de una reducción significativa en los costes de salida con la migración de tu nube.
También puedes diseñar tu infraestructura multinube para ganar flexibilidad. Utilizando la red como servicio (NaaS) en tu negocio, de modo que alquilas servicios de red de proveedores de nube para operar tu red sin necesidad de una infraestructura propia, puedes personalizar tu configuración de forma rápida y sencilla a medida que las necesidades de tu negocio van cambiando y escalar tus requisitos de almacenamiento y migración hacia arriba o hacia abajo en función de lo que requiera tu negocio.
Más información sobre cómo puede ayudarte la red como servicio (NaaS) de Megaport.
El almacenamiento vinculado a la nube permite a tu negocio utilizar capacidades avanzadas de análisis de datos y aprendizaje profundo (deep learning) compartido en varias nubes, lo que significa que puedes acceder a las diferentes aplicaciones que necesites y reducir significativamente la necesidad de trasladar datos hacia y desde tu entorno local.
Asimismo, puedes supervisar qué datos se almacenan y dónde, y asegurarte así de minimizar de forma eficaz la replicación allí donde no es necesaria. Cuando sincronizas datos entre nubes (normalmente para hacer copias de seguridad de tus datos a fin de poder recuperarlos), o entre proveedores locales y de nube, se incrementa el tráfico de datos que puede estar sujeto a costes de salida. Evaluando los requisitos de copia de seguridad de datos críticos y comprobando la duplicidad innecesaria, así como comprimiendo los archivos antes de enviarlos a la nube, puedes reducir significativamente estos costes.
Red subyacente
Aunque podríamos pensar en la nube como algo que está en el aire, solo es posible con la compleja infraestructura creada y mantenida en tierra. La red subyacente hace referencia a la infraestructura de red física o virtual que conecta a una empresa con un CSP.
Por ejemplo, las infraestructuras de red virtual como NaaS tienen diferentes costes dependiendo de la configuración que elijas y ofrecen diversas capacidades en función de lo que demande tu negocio. Los clientes suelen pagar una cuota mensual o a la carta por un servicio completo que incluye hardware y gestión.
Cómo reducir los costes subyacentes
Al elegir una NaaS escalable y segura en lugar de una conexión de proveedor de telecomunicaciones no escalable o la red pública de Internet, tienes un mayor control y una mejor visibilidad de cada componente de tu red multinube. Así puedes supervisar de forma eficaz el rendimiento de la subcapa e identificar con precisión cualquier fallo o ineficiencia en la red. Con la oferta de NaaS de Megaport, puedes ver estas estadísticas en un portal accesible y amplio.
Dado que la NaaS reduce las incidencias de redundancia, que equivalen a pérdida de productividad y costes de inactividad, puede ser un método excelente para reducir los costes asociados a las subcapas físicas tradicionales. La NaaS también permite la automatización de tareas por medio de una interfaz de programación de aplicaciones (API) para mejorar la productividad, lo que reduce los costes de recursos y mejora la escalabilidad de tu negocio, de modo que solo pagas por lo que usas.
Desviación de datos de nube a nube
Sin la configuración de enrutamiento adecuada, las redes multinube empresariales dependen en gran medida de la “desviación” o backhaul de tráfico. Con este método, los datos viajan entre distintos CSP a través de un entorno local, con frecuencia un centro de datos, entre entornos de nube.
Cuando tus datos se desvían entre distintos CSP, tienen que viajar a través de una red más compleja, lo que significa que tus gastos de nube se pueden disparar porque pagas por el kilometraje de datos extra. Además, con más puntos de fallo potencial y un viaje más largo del punto A al punto B, también puedes experimentar una mayor latencia y un menor rendimiento.
Cómo reducir los costes de desviación
Para mitigar los costes de desviación, los negocios necesitan una configuración multinube que permita a los datos viajar no solo hacia y desde nubes, sino también entre nubes: esto es lo que se llama enrutamiento de nube virtual.
Los enrutadores de nube virtual funcionan por medio de una subcapa de NaaS y permiten crear conexiones internube sin hardware, de modo que tus datos pueden viajar directamente de una aplicación de nube a otra sin que ello afecte a los costes, el rendimiento o la redundancia de tu red.
Cuando se utiliza un enrutador de nube virtual como Megaport Cloud Router (MCR), por ejemplo, es fácil configurar las conexiones internube: basta con implementar una conexión cruzada virtual (VXC) por medio del portal de Megaport para conectar tus nubes en cuestión de minutos y ampliar las ventajas del coste a la carta de tu configuración de NaaS en tu multinube.
Leer más sobre cómo MCR puede cambiar tu forma de interactuar con la nube.
Conclusión
Si bien los costes ocultos de la multinube pueden pasar desapercibidos, siempre hay maneras de encontrar y reducir estos costes ocultos para ahorrar en tus gastos generales de nube. Revisando tus costes de salida, utilizando una NaaS privada y segura, y adoptando un enrutamiento de nube a nube, puedes reducir significativamente los costes de salida ocultos y, además, disfrutar de otras ventajas.
Y asignando estratégicamente rutas de migración a la nube rentables y optimizadas dentro de tu infraestructura multinube, permites a tu negocio ahorrar algo de presupuesto para dedicarlo a lo que más necesites.